El Cementerio de Andacollo, esta inserto en la comuna minera del mismo nombre, ubicado a 54 kilómetros de La Serena, a 1.100 metros sobre el nivel del mar. Este cuenta con una superficie total de 9.772 metros cuadrados, propiedad del Arzobispado de La Serena, siendo con anterioridad propiedad y administrado por la parroquia de Nuestra Señora del Rosario de Andacollo.

En los registros que se encontraron, está el primer libro de inscripción, el cual data de 1758, por ende, se estima que la creación del camposanto de la comuna minera, data de principios de 1700 aproximadamente.

Sus muros perimetrales fueron construidos por pircas (muro de piedras puesta una sobre otra) los que hoy en día con el pasar de los años, se encuentran dañados y en proceso de restauración.

El cementerio católico de Andacollo es de carácter particular, de disposición católica, sin embargo, no discrimina el ingreso de personas fallecidas que practiquen otras religiones. Se encuentra ubicado en el corazón de la comuna minera, teniendo una de sus entradas en conexión con la entrada al templo parroquial, su horario de atención al público es de lunes a martes de 08:30 a 18:30 horas, que en la actualidad se encuentra con modificaciones debido a la compleja situación que se vive a nivel mundial por la pandemia.

En los primeros registros podemos encontrar los primeros funerales que se realizaron en ese entonces en la localidad de Samo Bajo, que antiguamente pertenecían a la comuna de Andacollo, de igual manera en ellos podemos encontrar las sepulturas de aquellos indígenas que habitaban el poblado minero, siendo estos mencionados por su nombre junto a su mestizaje o la tribu a la que pertenecían, igualmente se apunta la categorización de los funerales de ese entonces.

Dentro de los registros que encontramos, se puede constatar que antiguamente, en parte de las dependencias del cementerio funcionaba la antigua morgue de la comuna, en la cual se realizaban los procedimientos y eran regidos por las normativas sanitarias de ese entonces.

En la actualidad, aún se conservan algunas de las sepulturas antiguas, entre ellas personajes valiosos de la comuna minera en el ámbito religioso, como lo es el primer cacique, don Laureano Barrera, algunos misioneros y misioneras quienes fueron parte fundamental de la vida del pueblo, siendo la Madre Teresa Gubern, declarada Hija Ilustre de la comuna de Andacollo; de igual manera en el camposanto de Andacollo, descansan los restos mortales de quien fuera en vida, doña Marcelina Cortés Gallardo, alcaldesa de la comuna entre los años 1986 y 2004, siendo esta la edil con más años al cargo en la Región de Coquimbo, de igual manera su antecesor, don José Cifuentes Olivares.

Don Osvaldo Morata Cerda, fundador del cuerpo de bomberos de Andacollo, descansa en el camposanto de la comuna minera, al igual que don Humberto Escalante Rivera, creador de la Banda Instrumental que hasta la actualidad es posible escuchar y observar en los actos conmemorativos que se realizan en Andacollo, como en las festividades de la Chinita y que, con mucho orgullo, hoy lleva su nombre.

El 19 de febrero de 1964, siendo dueño la familia Jeraldo, quienes parte de ellos descasan en el Mausoleo familiar, se produce un derrumbe con 7 mineros en su interior, hoy en este Cementerio ya descansa uno de aquellos mineros de aquel hecho que marco la vida de los andacollinos, don Víctor Castillo Alfaro.

Desde la apertura del cementerio, este a enfrentando una seria de factores climáticos, entre ellos el temporal del año 1985, el cual se vio afectado parte del cementerio con hundimiento de sepulturas, además de ellos terremotos desde el inicio de su historia, resistiendo firmemente hasta el terremoto de 1997.

Siendo afectado ya en los terremotos del 16 de septiembre del 2015 y el del 19 de enero del año 2019, viéndose seriamente dañado en sus sepulturas más antiguas, las que dan el contorno al cierre del cementerio.

Debido al daño producido por los sismos, se construyeron nuevos nichos con una solides mayor a los anteriores, los cuales se encuentran en el acceso norte al Cementerio, luciendo de igual manera una nueva fachada, la cual siempre es acompañada de la cruz de Cristo.

El cementerio de Andacollo por ser de orientación católico, los nombres de las secciones en donde son ubicados los blocks de nichos son todos de origen bíblicos, de santos o de religiosos o religiosas que han marcado a la vida de los andacollinos. De igual manera los nombres de las secciones de las sepulturas que se encuentran en tierra son flores, con las cuales completamos el jardín del paraíso, en donde descansan nuestros familiares en los brazos del Señor de la vida.

El 1 de enero del presente año el Cementerio Católico de Andacollo es administrado por el Arzobispado de La Serena, el cual se encuentra realizando cambios intangibles como el regularizar procedimientos y protocolos, mientras que los cambios que deberían de suceder tangiblemente será la demolición de los nichos dañados y la nueva construcción de estos mismos, además de eso se espera contar con nueva tecnología, entre otros cambios que serán para el mejoramiento tanto físico del Cementerio como el mejoramiento de la opinión al ser visitado por tantas personas que año tras año recibe este campo santo.

La oficina de atención administrativa, se encuentra ubicada en el interior del mismo camposanto, la cual es atendida de manera presencial por su administrador en tiempos de normalidad y a modo de seguridad vía telefónica en prevención dada la emergencia sanitaria, sin embargo, de ser necesario se planifica una reunión con asistencia al cementerio para atender alguna situación requerida en horario de funcionamiento de 09:00 a 13:00 horas.

Dicha atención está enfocada en la regularización de los documentos o antecedentes faltantes, dar solución a problemas puntuales, en los cuales se vean afectados los familiares que tengan relación directa sobre sus deudos en dicho lugar, los cuales lo deben realizar personalmente.

Administrador: Fabián Véliz

Teléfono: +56 9 6553 4774

Email: fveliz@cementeriosar.cl

Dirección: Pedro de Valdivia 421, Andacollo